Creedme: una miniserie donde es más fácil ignorar que asumir la verdad
Recientemente, Netflix estrenó una miniserie que cuenta con ocho capítulos llamada Creedme, la cual está basada en lo que le ocurrió a una chica que acaba de ser violada en su propio hogar. Se muestra la poca credibilidad por parte de su círculo cercano y de la policía y, cómo gracias a dos detectives, se logra resolver el caso.
A diferencia de otras de las muchas series que se encuentran en la plataforma, Creedme tiene la particularidad de lograr un gran impacto, debido a que cuenta la devastadora historia de una violación la cual nadie cree. Este suceso se encuentra basado en hechos reales, además provoca que nosotros como espectadores seamos capaces de ponernos en el lugar de la protagonista, quien realiza una denuncia sobre violación y tanto sus cuidadores como los policías dudan de la veracidad de esta denuncia a causa de su actitud. Gracias a la incredulidad por parte de los escépticos agentes, Marie Adler, la chica que realiza esta acusación, se ve presionada a declarar que realizó una falsa denuncia. Esta acción la condenó socialmente, Marie se ve rechazada por sus amigos y las personas que ella consideraba familia, comienza a tener problemas en el trabajo y, más que nada, tiene problemas consigo misma, puesto que incluso ella se comienza a cuestionar si esto realmente sucedió.

Esta serie pone en controversia la calidad de los detectives e introduce múltiples interrogantes. Como principales preguntas podemos encontrar: ¿qué sucedería si esta situación me ocurre a mí y nadie me cree? ¿cómo se cuestiona este tipo de denuncia cuando es un tema tan fuerte y reciente? Y -a mi criterio, la duda principal, además la pregunta que provoca el cuestionamiento sobre lo real de la acusación- ¿cuál es la reacción que se espera de una persona que fue violada? En otras palabras, ¿se supone que hay una actitud esperable? Mediante estas dudas, que se presentan de manera implícita mientras va avanzando la historia, comienza a surgir la empatía.
Aquí nos encontramos con que no es así, con que al parecer la forma en la que se cuenta esta agresión tiene mucho más peso que las pruebas físicas sobre lo sucedido. Es que uno creería que, al ser víctima de una violación recibiría el apoyo y afecto de los más cercanos o, por último, que se haría una buena gestión del caso por parte de los especialistas. "Incluso la gente en la que confías, si la verdad es incómoda, no se la creen" esta es la frase que da cierre al tráiler de la serie, la que nos deja con cierta intriga en el pecho sobre qué es lo que haríamos si nos encontráramos en esta situación.
Para finalizar, Creedme es una serie que todas las personas con la madurez para entender y afrontar estos asuntos deberían ver, dado que trata de temas de los cuales como sociedad somos cada vez más conscientes, teniendo en consideración que los casos de abusos y violaciones han ido en aumento. En sí la serie toca una fibra sensible para todos, una agresión sexual y la credibilidad que se le da a la víctima.